Los humanos tenemos tendencia a guardar y venerar objetos que han pertenecido a seres que nos han sido queridos y respetados: familiares, amigos, individuos importantes, héroes, etcétera, con los que hemos podido tener alguna relación o ninguna. Todo aquello que tocó y usó durante los años de su vida el personaje en cuestión, ofrece a los ojos y sentimientos de quienes se sienten “seguidores” un algo que recubre aspectos mágicos y religiosos, amén de una admiración profunda. (…) la introducción y los seis primeros capítulos han sido realizados por Carlos Junquera Rubio. El séptimo es obra de Javier Emperador Marcos. Igualmente, los autores han declinado la descripción de las prendas por entender que de ese tema hay abundancia de aportes. Nos hemos centrado en la coralada y collarada ya que tipologías hay muchas pero entendemos que para la geografía del Órbigo en particular y para la de León en general es un ejemplar único.