El lector leonés se encontrará en estas páginas con unos datos que, tal vez, haya dejado en el olvido. Y el forastero, espero, descubrirá el carácter de los leoneses y su razón de ser.
Resulta una guía no escrita a la usanza y que se sigue con interés creciente, implicándonos con el protagonista en descubrir y descifrar los enigmas del abuelo, personaje cazurro y socarrón, leonés cien por cien. La autora ha sabido reencarnarse en el abuelo para darnos a conocer su enamoramiento del espíritu leonés, espíritu que sobrevuela a través de todo el libro.
Te prometo, lector, una lectura amena e instructiva. No creo equivocarme si te auguro que, una vez comenzada la lectura, no serás capaz de abandonarla hasta el final.