Después de 46 años esperando desde que se iniciara la solicitud, el Consejo de Gobierno declaraba el pasado agosto Bien de Interés Cultural con categoría de zona arqueológica al yacimiento de la “Corona de Corporales“.
Tuvo una gran importancia estratégica para los astures, jugando un papel crucial en las guerras astur-cántabras,
Fue destruido de forma intencionada y violenta entre el siglo II y I a.c. Se cree que este poblado nació como resultado de un repliegue hacia las montañas causado por la ofensiva romana.
Fue excavado por primera vez en 1977, cuando se llevaba a cabo una campaña de prospección arqueológica por la zona para estudiar las explotaciones auríferas romanas.
El yacimiento consta de viviendas, patios, almacenes, talleres y un foso defensivo.
De momento se han estudiado dieciséis de las habitaciones que dan al interior del recinto. Tienen suelos de tierra endurecida, y están levantadas con hiladas horizontales de pizarra, un material arquitectónico muy típico en el occidente leonés.
Los expertos apuntan a que fue un asentamiento aislado y autosuficiente, propio de los poblados montañeses
La respuesta es sí, pero con cuidado, tanto por el propio yacimiento como por usted mismo, ya que no hay escaleras de acceso. El castro se sitúa en un cerro a 1330 metros sobre el nivel del mar, y presenta un desnivel de entre entre los 30 y 50 metros.
Deberá tomar la carretera comarcal cv192 Bembibre-Arlanza hasta el kilómetro 21.
Fuentes: Sociedad Ibérica de Arqueología, cutura y patrimonio de la jcyl, europapress, Francisco Sánchez-Palencia, Dolores Fernández-Posse, Foto principal de la S.I.A