Un frío anochecer en una dehesa salmantina es testigo de un acto brutal: dos jóvenes descansan entre las encinas esperando la oportunidad de hacer realidad su sueño de ser toreros. Descubiertos por el personal de la finca son agredidos sin piedad dándolos por muertos. Uno de ellos es rescatado por el montaraz, personaje que disfruta, junto a su mujer y su hija, de un feliz y buscado retiro tras una azarosa y compleja juventud. Mientras la venganza va fraguando en la inmisericorde mente del sobreviviente, solo puesta en duda por la beatífica personalidad del montaraz, la vida palpita en la dehesa. Sus habitantes protagonizan escenas de amor y de celos, de fiestas y duelos, de perdón y rencores, de conformismo y soberbia…, recreando la vida rural de la posguerra española.